Ciclismo

Acabó la Vuelta a España, comienza el invierno ciclista

Hoy lunes, 15 de septiembre, comienza el invierno para los amantes del ciclismo. Porque aunque el invierno llegará oficialmente el día 22 de diciembre, los que nos regimos por el calendario de las dos ruedas, el final de nuestra ronda, la Vuelta Ciclista a España, nos lleva al frío ciclista. A ese final de temporada donde las grandes figuras deciden descansar, probar sus piernas en pruebas como el Giro de Lombardía, donde aún podremos disfrutar de ellos.

Pero aún sufrimos esa resaca emocional que nos deja el “aquello que no fue”, las malditas caídas de Froome, Contador y Nairo nos impidieron saborear aquellos duelos de titanes que tanto tiempo llevábamos esperando. ¿Qué hubiera sido de esas subidas en los Alpes, en Chamrousse  y Risoul en los Pirineos, en Pla d’Adet con Froome y Contador en el tablero acompañando a Nibali?. Y qué bonita batalla hubiésemos visto en la etapa reina de esta Vuelta, en La Farrapona, con Nairo Quintana intimidando al tridente español, a Froome.

Posiblemente hubiéramos disfrutado de un combate épico, pero ahora nos queda esperar, cruzar los dedos para que las caídas y lesiones les acompañen durante la temporada para llegar con el pico de forma adecuado. A los tres, no sólo a Contador, porque las victorias del pinteño saben mejor cuando se pelean frente a corredores tan combativos como Froome. Cuando se encuentra un oponente a su altura para protagonizar un combate legendario, necesario para conseguir la gloria deportiva. Porque las victorias tienen mayor reconocimiento cuando se han sufrido hasta el último metro. Corredores combativos, que dejan el alma y cada milímetro de su fuerza en cada carrera. Y eso fue lo que le faltó a Nibali. Fue tan superior, que se echó de menos a Contador y Froome, heridos en sus hogares ante fatales caídas. En el mundo del deporte, un antagonista a tu altura, es innegociable. Pero por favor, no le resten méritos a Nibali, fue el verdadero líder de la carrera con su grandioso rendimiento y lucha en la quinta etapa, aquella entre el adoquinado que tanto pánico sembraba.

Son corredores que dignifican el ciclismo, ante dirigentes podridos en sus propios intereses olvidándose del atractivo inherente del ciclismo; que no respetan los plazos, que castigan a corredores tres años después de su posible positivo. O peor, meses después de un positivo que nunca se dio, y deben rectificar sin posibilidad de compensación a corredores que tanto se sacrifican por el deporte que aman.

Y los espectadores españoles han sabido corresponder a la épica lucha de esta Vuelta, con una cuota de pantalla del 12,7%. La etapa más vista de la 69ª edición de la Vuelta Ciclista a España con 2.4 millones de espectadores, y un 19.4 %, el dato más alto recaudado por La 1, desde 2012, con la Vuelta que se dilucidó con la batalla titánica entre Valverde, Purito y Contador. Aquella que tuvo como firma principal en el recuerdo Fuente Dé con el ataque de Contador a falta de 50 kilómetros que le llevó a ganar la Vuelta. Cuando el recorrido se ajusta a un roster de corredores de talla mundial, el espectador sabe agradecerlo.

El total de personas que disfrutaron de esta Vuelta fueron 21.455.00 millones, y eso es una gran Victoria. Sí, con mayúsculas, porque en un mundo donde la mayoría de la prensa deportiva presta casi su totalidad de atención al fútbol, conseguir esta cifra es una VICTORIA. Y esta Vuelta ha subido enteros, ha conquistado a corredores como Froome ante los que quitarse el sombrero con su lucha, con su batalla y su saber estar.

Ahora, nos queda a corto plazo el Mundial de Ponferrada. Dará comienzo el 21 de septiembre y terminará el 28 del mismo mes. Contará con pruebas femeninas, masculinas, sub 23 y júnior. Un verdadero espectáculo en nuestro país, donde esperamos que la organización esté a la altura.