Rugby
Diario de una rugbier
шаблоны YooTheme
шаблоны Недвижимости joomla
- Cristina Casillas Buyolo
- Domingo, 24 Agosto 2014 12:37
Me gusta madrugar los domingos. Me gusta desayunar café y tostadas mientras veo la Fórmula 1 en la televisión; coger energías en cada bocado y cargarlas junto a un gran saco de sueños en mi bicicleta. Me gusta levantarme temprano los domingos porque cuando salgo a correr con mi bicicleta, me gusta mezclarme entre el hoy y la noche de ayer. Al igual que yo, muchas personas comparten este extraño gusto por madrugar los domingos, calzarse las zapatillas y salir a correr tras sus sueños.
Al igual que cualquier persona que realice algún deporte de forma competitiva, ya sea individual o en equipo, mi mayor sueño es formar parte de la Selección Española de mi deporte, que es el rugby. Para mí, poder representar a mi país por todo el mundo haciendo lo que me gusta, que es jugar al rugby, sería todo un sueño. Pero no es mi meta. Cuando llegas a implicarte al máximo en cualquier cosa, ya sea deporte o no, tienes que pararte a pensar, respirar dos veces, abrir los ojos y establecer tus metas. Jugar en la Selección Española de rugby es mi sueño, pero no es mi meta; hay cientos de chicas que son mejores jugadoras que yo y, siendo realistas, es algo muy complicado de alcanzar y arriesgado como para ver cómo tu futuro se rompe por haber aspirado a algo tan alto. Por tanto, decidí marcarme otra meta. Una meta real que sería muy dura de conseguir, pero contaría con el apoyo de mis 25 compañeras de equipo y además me acercaría a mi sueño.
A partir de ese momento, mi meta sería dar el máximo de mí misma. No decaer en ningún momento, continuar con más fuerza cuando mi cuerpo dijera que no y, sobre todo, trabajar y luchar cada día por ser mejor, tanto dentro como fuera del campo. Mi objetivo es amar lo que hago en cada momento, entrenar con la pasión con la que un niño abre sus regalos de Navidad, seguir hacia delante impulsada por el aprendizaje de mis errores y dar gracias por todo lo que aparezca en mi camino.
Mi meta es entrenar duro cada día y dar lo máximo de mí misma para después poder entregárselo a mis compañeras.