The Real Life
Entrena sin excusas
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- Coral Aja
- Sábado, 09 Noviembre 2013 16:09
Vivimos en un mundo en el que las prisas están a la orden del día. En el que las agendas no tienen suficientes hojas para anotar todo lo que tenemos que hacer. Todo el día de aquí para allá, trabajando, estudiando, aprendiendo idiomas, haciendo recados… En fin, repartiendo las 24 horas que tiene un día de la mejor manera posible para que podamos hacerlo todo, sin olvidarnos de respirar, comer y dormir.
Es curioso pero en la mayoría de ocasiones, si tenemos que “sacar” fuera de la agenda del día algo, es un entrenamiento, un rodaje, una carrera… Craso error. Pensamos que no tenemos tiempo para todo y que “por faltar un día al entrenamiento” tampoco pasa nada. Y sí, por una vez no pasa nada, pero en muchas ocasiones ese día se acaba cogiendo como una rutina de la que luego es muy difícil escapar.
Llegados a este punto deberíamos replantearnos nuestra organización diaria. Puede que pensemos que la tenemos más que definida, más que ajustada, pero estoy segura de que si revisamos nuestro “horario diario” encontramos más de un hueco para entrenar, correr o ir al gimnasio. Piensa, por ejemplo, cuando sales del trabajo o del centro de estudios. Sé que cuesta, que estás cansado, pero no hay nada como llevarse el traje de luces y ponerse en marcha nada más salir. ¿Que trabajas o estudias durante todo el día y llegas a tu casa casi de noche? ¡No pongas excusas! Ten preparada la ropa y en cuanto llegues vete a entrenar. Te sorprenderás de lo bien que responde el cuerpo al descargar la adrenalina y tensión acumulada durante el día. Y además dormirás mejor.
¿Y qué hay de salir por las mañanas? Sé que es “doloroso” calzarse las zapatillas y echarse a la calle a las 6 de la mañana, pero cuando algo te importa de verdad y quieres conseguir un objetivo determinado, las horas del reloj no tienen que ser una excusa.
Al principio salir a correr a esas horas que quizá consideres intempestivas, te supondrá un esfuerzo añadido. Pero poco a poco podrás comprobar cómo no sólo te acostumbrarás a salir a esas horas, sino que además tu cuerpo, que es muy sabio, te lo pedirá. Las excusas están en nuestra cabeza, y no son más que obstáculos que nos ponemos día a día y que nos impiden disfrutar al máximo de la vida. Porque no hay nada que aporte más vida que desconectar del mundo por un rato y practicar una de las cosas más saludables y que más nos gusta: el deporte.
Ya lo decía Benjamin Franklin: “Nunca dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”. A partir de ahora recuerda esta frase cuando, en ese repentino “no-tengo-tiempo-para-todo”, decidas que lo mejor es no salir a entrenar, para ir más holgado. ¿Estás seguro de que no lo puedes hacer hoy?